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El Proyecto Cuenca Amazónica estuvo presente en dos importantes paneles de la Semana Mundial del Agua, celebrada en Estocolmo del 24 al 28 de agosto. Representado por Fernando Cisneros, especialista técnico en Gestión Integrada de Recursos Hídricos (GIRH), el Proyecto contribuyó al debate sobre los vínculos entre los bosques, el agua y la agricultura, además de destacar la importancia de la gobernanza regional y la cooperación transfronteriza entre los países miembros de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) para la seguridad hídrica de la Amazonía.

Gobernanza transfronteriza del agua

En la sesión dedicada a la gestión de las aguas compartidas en América Latina y el Caribe, promovida por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA), la Organización de los Estados Americanos (OEA), la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa (CEPE), la OTCA y el GEF-IW:LEARN, Cisneros destacó que la gestión del agua actúa como eje articulador en la Amazonía, permitiendo avanzar en respuestas integradas que concilian la conservación de los ecosistemas, la adaptación climática, la salud pública y los derechos de los pueblos indígenas.

Destacó la relevancia de instrumentos regionales como el Análisis Diagnóstico Transfronterizo (ADT) y el Programa de Acciones Estratégicas (PAE), que orientan la cooperación amazónica, además de la creación de la Red Amazónica de Autoridades del Agua (RADA) en 2024. Como nuevo mecanismo regional permanente, la RADA está trabajando en la elaboración de un Libro Blanco para la Gestión Integrada de los Recursos Hídricos (GIRH), que deberá consolidar principios, protocolos de monitoreo y estrategias de fortalecimiento institucional, con una amplia participación de las comunidades locales y los pueblos indígenas.

Otro punto destacado por Cisneros fue la necesidad de integrar la adaptación climática en la gestión de ecosistemas clave, como glaciares, páramos y humedales. En este proceso, presentó el Observatorio Regional Amazónico (ORA), una iniciativa de la OTCA que busca consolidar y democratizar el acceso a datos hidrológicos, socioeconómicos y climáticos en tiempo real, ofreciendo información esencial para la toma de decisiones estratégicas.

Bosques, agua y agricultura: integración para la resiliencia

En el panel Bosques y clima: beneficios de los bosques para el agua y la agricultura, organizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Universidad Sueca de Ciencias Agrícolas (SLU), el Instituto Ambiental de Estocolmo (SEI) y la Iniciativa Sueca de Red Internacional de Agricultura (SIANI), Cisneros destacó que la ciencia ya ha demostrado los beneficios de los bosques para la agricultura y la seguridad hídrica, pero que el gran desafío radica en la coordinación entre sectores: agua, energía, bosques, medio ambiente y agricultura.

Según Cisneros, es necesario invertir en herramientas analíticas, datos de calidad y capacitación técnica para apoyar las decisiones conjuntas y fortalecer la resiliencia de la Amazonía ante el cambio climático. “Proteger los bosques, mejorar la productividad agrícola y diversificar la matriz energética hace que todo el sistema sea más resiliente”, afirmó.

Cooperación para el futuro del agua en la Amazonía

A lo largo de su participación en los dos paneles, el Proyecto Cuenca Amazónica reforzó el mensaje de que la gestión integrada del agua, articulada con otros sectores y respaldada por la ciencia, los datos y la cooperación regional, es esencial para fortalecer la resiliencia de la Amazonía frente al cambio climático.

La acción coordinada entre los países miembros de la OTCA representa no solo un avance para la gobernanza hídrica de la región, sino también un compromiso con el desarrollo sostenible, la seguridad hídrica y la protección de los pueblos y ecosistemas amazónicos.

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